El 20 de octubre de 2012, personal de la comisaría Santa Elizabeth - Lima, a
solicitud de Edson Joel Ñañez Pérez (18) intervino a Víctor Alberto Cotaquispe
Valerio (29), quien en compañía de otro sujeto le arrebató su teléfono celular. El
hecho ilícito sucedió en circunstancias que el agraviado se encontraba en el interior
de una tienda, a dos cuadras de su domicilio, donde fue interceptado por el imputado,
quien lo cogió por la espalda, y con una botella rota lo amenazó y en compañía de
otro sujeto lo sacaron de la tienda para luego conducirlo a su vivienda del imputado,
una vez en el interior lo despojaron de su celular. El imputado, en presencia de la
representante del ministerio público aceptó haber participado en el hecho delictuoso.
Durante el registro personal que se le efectuó al imputado, por parte del personal
policial interviniente, no se le halló ninguna pertenencia del agraviado. Víctor
Alberto Cotaquispe Valerio fue condenando a como autor del delito contra el
patrimonio – robo agravado y le impuso a doce años de pena privativa de libertad
efectiva y fijó la suma de diez mil soles por concepto de reparación civil a favor del
agraviado. Dicha sentencia fue materia de recurso de nulidad interpuesto por el
sentenciado, el mismo que fue concedido. El Ministerio Público interpuso recurso de
nulidad, sin embargo, al no cumplir con presentar los fundamentos de ley fue
declarado improcedente. Elevado el expediente a la Sala Penal Transitoria de la
Corte Suprema, fue remitido a la Primera Fiscalía Suprema en lo Penal que mediante
dictamen, opinó no haber nulidad en la sentencia impugnada. Devuelto el expediente
a la Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema, el 9 de julio de 2015, declaró haber
nulidad en la sentencia impugnada, y reformándola absolvió a Víctor Alberto
Cotaquispe Valerio de la acusación fiscal
On October 20, 2012, staff of the Santa Elizabeth-Lima police station, at the request
of Edson Joel Ñañez Pérez (18) intervened with Víctor Alberto Cotaquispe Valerio
(29), who in the company of another guy snatched his cell phone. The wrongful act
happened in circumstances that the aggrieved was in the interior of a store, two
blocks from his home, where he was intercepted by the accused, who caught him in
the back, and with a broken bottle threatened him and in the company of another guy
took it out of the store and then drive him to his home of the imputed, once inside he
was stripped of his cell phone. The accused, in the presence of the representative of
the Public Ministry accepted to have participated in the fact criminal. During the
personal registration of the accused, by intervening police personnel, no belonging to
the aggrieved officer was found. Víctor Alberto Cotaquispe Valerio was convicted as
the perpetrator of the crime against the estate – aggravated robbery and sentenced
him to twelve years imprisonment of effective liberty and fixed the sum of ten
thousand Suns for civil reparation in favor of the aggrieved. This sentence was a
matter of recourse to annulment brought by the sentenced, the same one that was
granted. The Public Ministry filed an appeal for annulment, however, by failing to
present the basics of law was declared inadmissible. Elevated the dossier to the
Transitional Penal Chamber of the Supreme Court, it was referred to the first
Supreme Prosecutor's office in the Penal state, which, by opinion, expressed no
nullity in the contested sentence. Returned the file to the Transitional Criminal
Chamber of the Supreme Court, on 9 July 2015, declared nullity in the contested
sentence, and by reforming it, it acquitted Víctor Alberto Cotaquispe Valerio of the
fiscal accusation.